28 septiembre, 2010

EL SCRIPTORIUM MEDIEVAL: EL TALLER EN EL QUE SE PRODUCÍAN LOS CARTULARIOS

The Medieval Scriptorium: The Workshop where Cartularies were made.
Le Scriptorium médiéval: L'atelier dans le quel les Cartulaires étaient fabriqué.

El Cartulario es un tipo documental escrito medieval que tuvo su época de apogeo, es decir, de mayor producción y difusión, entre los siglos XI y el XIII. En otras palabras, el cartulario podríamos comprenderlo también como una manifestación de la Civilización del Occidente medieval y, concretamente, de la sociedad del Románico.

Michael Clanchy, uno de los mejores conocedores de la cultura escrita del Occidente medieval, ve al documento escrito, ya sea éste un testamento, un diploma real, un cartulario o un registro como el producto de una tecnología propia del medievo europeo.

Los Cartularios como documentos escritos son, por tanto, el producto de un taller especializado en el arte de la escritura monumental que generalmente se conoce como Escritorio, en lengua española, y Scriptorium en lengua latina.

En sentido literal, el "Scriptorium" es definido como el lugar destinado a la escritura, que comúnmente se refiere al lugar, habitación o cámara que en la Europa medieval se destinaba fundamentalmente en los Monasterios para la copia de manuscritos por los monjes escribas. A partir de diferentes fuentes escritas, registros de cuentas, vestigios arquitectónicos y excavaciones arqueológicas muestran, al contrario de lo que se cree popularmente, que este tipo de habitación sigularizada raramente existía: la mayoría de los manuscritos monásticos fueron hechos en huecos, hornacinas o celdas situadas en el claustro, o dentro de las propias celdas de los monjes. Las referencias que aparecen en los modernas investigaciones científicas referidas a los "Scriptoria" normalmente se refieren más a la actividad escrituraria colectiva que se hacía dentro de un monasterio, más que a una habitación o espacio singularizado.

Expondremos seguidamente una visión general sobre lo que a nivel de divulgación se indica que es un escritorio, escriptorio o Scriptorium. Para no confundirlo con una oficina documental de tipo cancilleresca o una oficina mercantil, muy habituales a partir de la Baja Edad Media, usaremos el término "Scriptorium" para referirnos a este taller especializado en la escritura de códices o documentos durante la alta y plena Edad Media fundamentalmente.



Un Scriptorium (pl. Scriptoria) es una habitación destinada a la transcripción de manuscritos.

Antes de la invención de la imprenta de tipografía móvil, un Scriptorium fue habitualmente un apéndice o anexo a la librería o biblioteca de una institución, generalmente eclesiástica. Trás la destrucción efectiva de las bibliotecas de la Antigüedad clásica, especialmente las del mundo romano, después de la promulgación de los decretos del emperador Teodosio en la década comprendida entre entre los años 390 y 400, y tras el colapso general de las instituciones públicas romanas, los "Scriptoria" fueron mantenidos, según los datos que nos han llegado, casi exclusivamente por las instituciones cristianas, desde comienzos del siglo V en adelante.

Las noticias que poseemos de los "Scriptoria" en Grecia y Roma son mucho más abundantes que acerca de los primeros escribas (lat. scriptores) y sobre los propios autores cristianos, sobre su organización y su control, y sobre sus misiones y relevancia social. La publicación de los textos en la Antigüedad clásica por lo común implicaba la copia efectiva de múltiples versiones textuales producidas en los "Scriptoria". En estos talleres, un manuscrito podía ser dictado cuidadosamente a un amplio grupo de escribas que trabajaban simultáneamente. Ésto implicaba o permitía la producción de varios duplicados al mismo tiempo, con la garantía de cierto control sobre la exactitud de la versión o transmisión textual.

En los monasterios, el "Scriptorium" era una habitación o espacio, raramente un edificio independiente, creado de forma diferenciada para los profesionales o especialistas en la copia de los manuscritos dentro de esa institución eclesiástica; un lugar donde la copia de los textos tenía garantizada el abastecimiento de los materiales e instrumentos necesarios en las rutinas del equipo o comunidad de escribas, y servía como trabajo manual conforme a lo que estipulaba la regulación de las reglas monásticas, pero permitiendo la elaboración del producto deseado. Los comentarios más tempranos sobre la Regla benedictina incluyen e insisten en la labor de transcripción como una de las ocupaciones comunes de la comunidad monástica. San Jerónimo vió en los productos del "Scriptorium" una fuente de ingregos para la comunidad monástica.

El papiro fue el soporte escriturario preferido en la Antigüedad, pero llegó a ser un producto muy caro con el tiempo y difícil de conseguir por los mercaderes, por lo que comenzó a ser sustituido por el pergamino. Durante los siglos VII y IX, muchos de los primeros pergaminos manuscritos fuero borrados y raspados para volver a usarlos como soporte escriturario, dando lugar a los "Palimpsestos". Muchos de los trabajos escritos de la Antigüedad con frecuencia se han conservado en la forma de estos palimpsestos. En el siglo XIII el papel comenzó a desplazar al pergamino. Dado que el nuevo soporte comenzó a ser más barato, el pergamino quedó reservado como soporte para los documentos más solemnes y elitistas dotados de una importancia singular.

Hasta que no se inventó la imprenta en el siglo XV, la escritura se realizaba a mano. La mayoría de los libros de las librerías monásticas debieron ser copiados, ilustrados y encuadernados en el mismo lugar en que se producían por los propios monjes o monjas, dentro de éste área singularizada en el complejo monacal o catedralicio, como era el "Scriptorium".

El contenido de las librerías consistía fundamentalmente en Biblias, en las que cada ejemplar a veces estaba constituido por hasta nueve grandes volúmenes debido a sus grandes dimensiones; Misales, Psalterios y otros libros destinados al servicio religioso y al culto. También solían encontrarse los escritos de San Gregorio Magno y otros Padres de la Iglesia, libros sobre Gramática latina y otras compilaciones destinadas a la enseñanza en las escuelas monásticas, episcopales o catedralicias. Estas últimas solían ser recopilaciones copiadas de fragmentos o textos completos de autores de la Roma clásica o Historias. Con el tiempo, las bibliotecas medievales se incrementaron con los trabajos de los juristas cristianos del medievo europeo, sobre Teología, Filosofía, Medicina y Lógica.

Normalmente un "Scriptorium" era una dependencia aneja a la librería; doquiera hubiera una biblioteca que por lo común pudiera asumir la producción del "Scriptorium", es decir, que éste trabajara para abastecer las necesidades de tal biblioteca. Situación esta ideal que no se debió dar dentro de una misma institución durante todos los siglos del Medievo. De hecho, parece que una vez que la librería de la catedral o del monasterio estaba satisfecha cesaba la actividad del escriptorio. Además, a partir del siglo XIII comenzarón a desarrollarse las tiendas especializadas en la venta de libros, dentro del contexto de secularización de la cultura que se manifestó especialmente durante esta centuria. También los escribas profesionales comenzaron a tener sus tiendas o escritorios abiertos al público de las ciudades; aunque normalmente en estos últimos, probablemente no se tratara más que de un simple escritorio o banco próximo a una ventana dentro de su propia casa.


Fresco de J. W. Alexander. Library of Congress (USA).

Muchas veces el "Scriptorium" era la dependencia del monasterio que tenía más actividad. Los libros eran constantemente copiados y renovados; muchas cartas y documentos necesitaban ser escritas y archivadas; y los códices manuscritos tenían que ser transcritos e iluminados. En algunos sitios, como en el Norte de Europa, debido al clima más frío y húmedo, estos talleres eran construidos completamente con madera al norte de los claustros, protegidos por los muros de la Iglesia del viento del norte y orientados al mediodía para aprovechar la máxima exposición de la luz del diurna. Cada "Scriptorium" era una unidad independiente, separado y diferenciado de sus vecinos. En otros lugares se disponía de unas buenas instalaciones preparadas 'ex professo' para realizar este trabajo, y que corrientemente eran construidos y acondicionados sin dejar mucho rastro en las fuentes. El fuego estaba prohibido en el "Scriptorium", dado que los códices más valiosos debían ser protegidos de los peligros del fuego y de la cera hirviendo.

Instrumentos y herramientas del Scriptorium medieval
Los instrumentos para la escritura eran manufacturados en el propio lugar ("in situ") tan pronto como se necesitaban, incluyendo las tintas, el pergamino y la vitela (lat."vellum"); y el papel no fue usado hasta muy avanzado el período medieval, plumas y estilos de ave, pinceles, raspadores de piel y alisadores.

Preparación de los cuadernos de pergamino
El pergamino era fabricado generalmente a partir de la piel de ovejas o cabras, hasta conseguir una superficie lisa y fina especial para recibir la escritura, mientas que la vitela, obtenida ésta a partir de la piel de terneros recien nacidos, dotada de mayor delgadez y fortaleza en el soporte. El curtido, raspado y limpieza del pergamino y la vitela proporcionaba un soporte secante especialmente adecuado para recibir la tinta en los cuadernos, folios y páginas resultantes.

El color dorado a veces era conseguido mezclando huevo y agua, como otras tinturas en pequeños cuencos; y en los mejores momentos y talleres se conseguía usando láminas o raspaduras de oro. Una vez aplicado el dorado, la superficie del folio debía ser barnizada, a partir de un producto conseguido a partir de la cocción de huesos de animales.

Madrid, 27 Septiembre de 2010.
Autor: Alfonso Sánchez Mairena. Editor de http://cartulariosmedievales.blogspot.com/


Beda el Venerable
Referencias







23 septiembre, 2010

EXPOSICIÓN DE CARTULARIOS REALES DE NAVARRA

Los Cartularios reales navarros: La Cultura escrita como expresión del Poder real.
Les Cartulaires royaux navarrais: La Scripturalité comme l’expressión du Pouvoir royal.

The royal Cartulaires of Navarra: The Literacy as the Expression of the Royal Power.




Una doble exposición internacional tendrá como protagonista a un cartulario español, el conocido Cartulario del rey Carlos II de Navarra, monarca de la dinastía capeta de origen francés, que reinó entre 1332 y 1387, y que ha pasado a la historia con el nombre de Carlos “el malo”.
La exposición tendrá lugar primero en la ciudad francesa de Pau (Pirinéos Atlánticos, Francia), entre el 15 de septiembre y el 10 de noviembre de 2010; pasando posteriormente a Pamplona (Navarra, España). En la primera fase, la exposición será accesible en la sede el Conseil Général des Pyrénées-Atlantiques, Hôtel Du Départament, Salle des Arches; y en la segunda, podrá ser visitada en la sede del Archivo General de Navarra.
 
En “post” de 16 de junio de 2009, dábamos noticia de de esta iniciativa en el artículo titulado “Cartulario de los reyes de Navarra”, que se puede localizar a partir del punto de acceso “Cartulario real” que figura en la lista alfabética de “Temas” de este “blog”.



La iniciativa surge de un convenio de colaboración entre el Gobierno Foral de Navarra, a través del Archivo General navarro y la Región francesa de Aquitania, al mismo tiempo que han colaborado estrechamente las Universidades Pública de Navarra y el Archivo Departamental de los Pirineos Atlánticos. Producto de este complejo de instituciones que intervienen, y la rentabilidad mediática de la autoridad competente, aquende las fronteras, algún cibernauta ha precisado su malestar en algún foro asociado a las noticias de referencia, denunciando como de nuevo el mundo de la cultura, de los archivos son pasto del “politiqueo”, y de cómo en este caso el cartulario y el documento medieval vuelven a ser el Totem de la identidad nacional, regional o local. En alguno de los primeros “post” de este “blog” usamos eufemísticamente la expresión “archivia ancilla politicae” para otro caso. Alguna mente preclara ha relacionado esta actividad en relación con la integración de Navarra en España, que algunos “travisten” como la conquista castellana de Navarra, obviando que Navarra es la madre de Castilla; mientras que otros buscan estrechar lazos capetoides con la cultura francesa, abjurando de la filiación hispana. ¡Jesús, qué plaga!, entre unos y otros, cuando en realidad, un cartulario como este sería la más viva expresión de una técnica o una tradición escrituraria propia de todo el Occidente medieval, y que no conocía fronteras geográficas ni lingüísticas. Como dirían las personas sabias de la generación de nuestros abuelos: ¡¿cuándo se ha visto que las lenguas que fueron creadas para que los hombres se comunicaran, sirvieran para todo lo contrario, y para enfrentarse …. Y, et, eta, e?! El problema en esencia sería de falta de cultura escrita en las atávicas mentes identitarias modernas.

Relevancia mediática de los Cartularios reales navarros.
Esta exposición la destacamos porque da relevancia al cartulario, como elemento material de la cultura escrita medieval, y lo imbrica en una de las líneas más modernas de investigación en las que se están revalorizando estos viejos documentos: las relaciones entre el poder y la escritura en la Edad Media europea. Nada más que por eso, merece que le dediquemos atención.
Por otro lado, hemos comprobado como en algún caso un redactor periodístico se ha aventurado a comprender entre sus notas escritas en qué consistía un cartulario medieval, qué función representaba, y especialmente los cartularios reales navarros. Merece la pena que transcribamos las palabras de alguno de estos “teletipos”, inspirados en una nota de prensa, que sí parece redactada por alguien que sabe del tema, cosa no habitual en los gabinetes de imagen que asesoran a los Potentiores:
El argumento principal de la exposición se centra en los cartularios de los reyes de Navarra, documentos legales que confirman y explican la historia. La exposición se estructura en cuatro bloques, a través de los cuales se descubre cómo estos príncipes y reyes ejercieron su poder, dejando constancia y memoria de él. Un primer bloque explica los lazos familiares y políticos que situaron a los príncipes franceses en el trono de Navarra, fraccionando sus intereses entre ambos reinos. Una segunda sección se centra en el soberano y en las variantes en las que se manifiesta su majestad. El tercer bloque, núcleo de la exposición, muestra los cartularios regios de la familia Navarra conservados en Pamplona y Pau: estos manuscritos son un soporte tanto de la expresión del poder como de la memoria de ese poder. El último bloque presenta el final de las dinastías francesas en Navarra, punto de partida de memorias distintas, reivindicaciones y olvidos. En 1512, los últimos reyes privativos de Navarra conservaron en Pau una parte de sus archivos, en particular aquella relacionada con la reivindicación del reino o, sobre todo, con la gestión de sus posesiones francesas."

Las piezas que componen la exposición
En los Archivos Departamentales de los Pirineos Atlánticos (Pau, Francia) se conserva un cartulario real navarro, conocido como “Cartulario Evreux”, que fue compilado a finales del siglo XIV para transcribir una selección de documentos por orden del rey Carlos III de Navarra (1387-1425). La compilación de documentos se refieren principalmente a bienes y derechos pertenecientes a la familia real que quedaron en territorio francés, datados entre 1270 y 1372. Junto a este códice diplomático, la exposición estará compuesta por otros cuatro cartularios reales preservados en el Archivo General de Navarra (Pamplona, España).
Además de los cartularios, también se exponen 31 documentos y diplomas medievales procedentes de ambos archivos, además de otros objetos materiales medievales como el arca relicario con el corazón del rey Carlos II de Navarra.
Algunos de estos documentos son:
  • 1512. Juan de Albret y Catalina de Foix, reyes de Navarra nombran procuradores para prestar homenaje al rey de Francia por el ducado de Nemoux.
  • 1231. Sancho VII el Fuerte prohija a Jaime I de Aragón para que le suceda en el trono de Navarra.  
  • 1390. Acta de Juramento, coronación y unción de Carlos III de Navarra en la iglesia catedral de Santa María de Pamplona.  
  • 1385. Testamento de Carlos II de Navarra. Su corazón se conservará en Ujué, sus entrañas en Roncesvalles y su cuerpo en Pamplona. El corazón de Carlos II se ha trasladado en su urna con motivo de esta exposición desde Santa María de Ujué a Pau.
  • Cartulario llamado de Carlos II de Navarra, recoge escrituras entre 1297 y 1372, papel confeccionado probablemente entre 1372 y 1404.
  • Cartulario de Teobaldo I de Navarra, recoge escrituras entre 1033 y 1253. Recopilado en el siglo XIII, pergamino.
  • Cartulario de Teobaldo I de Navarra, recoge escrituras entre 1143 y 1248. Recopilado en el siglo XIII, con un preámbulo e índices realizado en 1619, pergamino.
  • Cartulario con los homenajes prestados por los señores de Mixa-Ostabarets a los reyes de Navarra (1247-1406), realizado en el siglo XV, papel.
  • Cartulario Magno. Reúne escrituras entre 1027-1379, la primera parte, y entre 1027 y 1384, la segunda. Recopilado en el siglo XV, pergamino.
  • 1533-1548. Inventario de los archivos de la familia Albret, concerniente a todas las posesiones de la familia.
  •  1524-1528. Registro de cuentas del Tesorero de Navarra.

Curiosidades. En algún caso, como en la imagen de la vitrina, más que ante un cartulario estamos ante un Liber Kalendarum.


La publicación sobre los cartularios
En la nota de prensa del gobierno navarro se indica lo siguiente:
Esta edición cierra tres años del mencionado programa de investigación transfronterizo denominado “Los Cartularios de los reyes de Navarra”. Fruto de la investigación y con el afán de divulgar sus conclusiones, se ha editado y presentado el libro “Le Cartulaire dit de Charles II roi de Navarre / El Cartulario llamado de Carlos II rey de Navarra”, publicación de 464 páginas, que se venderá al precio de 18 euros. La tirada es de 750 ejemplares (500 para el Gobierno de Navarra y 250 para la Université de Pau et des Pays de l’Adour).
Los documentos de este cartulario se refieren tanto a las posesiones francesas y a los solares patrimoniales de un linaje de príncipes franceses de primer orden, como a las estrategias y reivindicaciones de quienes eran, además, reyes de Navarra. Carlos II es el protagonista más evidente, legando incluso su nombre a este cartulario según consta en el inventario de los Archivos Departamentales de los Pirineos Atlánticos, pero también están presentes otros miembros de familias reales francesas y navarras, así como los avatares relativos a tierras y hombres, desde Normandía hasta Navarra.
Esta edición abre una nueva colección dentro de las ediciones de fuentes para el estudio de la historia de Navarra (CODHIRNA, Corpus Documental para la Historia del Reino de Navarra) del Departamento de Cultura y Turismo, que será seguida de la de los diversos cartularios de los reyes de Navarra. El estudio y la edición de este conjunto se inscriben en el contexto de una renovación de la investigación aplicada a este tipo de documentos desde hace 15 años. Si algunos de estos cartularios son conocidos, lo han sido casi siempre de manera fragmentaria o parcial. La publicación conjunta de este conjunto documental y su puesta a disposición de la comunidad científica, permitirá iluminar la formación original del Archivo de los reyes de Navarra, su evolución y su posterior disociación.
Estos cartularios forman una colección diplomática ideada por los reyes de Navarra. Para cada uno de ellos es preciso ocuparse de los contextos políticos que presidieron su elaboración, redacción y conservación, en una época en la que el reino de Navarra se extendía por las dos vertientes del Pirineo, cuando la dinastía reinante en Pamplona era una de las grandes familias francesas próximas al trono de Francia. Estos príncipes de Champaña, de Evreux, convertidos en reyes de Navarra pero siempre dotados en el reino de Francia, no cesaron de tejer lazos de una parte a otra de la cordillera, ni de seguir sus propias estrategias políticas, familiares o dinásticas. Ellos hicieron copiar en estos cartularios los documentos dignos de conservar la memoria de sus derechos y reivindicaciones, de su poder y su autoridad.
Madrid, 23 Septiembre de 2010.
Alfonso Sánchez Mairena. Editor de http://cartulariosmedievales.blogspot.com/  
http://www.diariodenavarra.es/20100914/culturaysociedad/cartularios-escritura-poder-real.html?not=2010091401455771&idnot=2010091401455771&dia=20100914&seccion=culturaysociedad&seccion2=culturaysociedad&chnl=40 (23/09/2010).


Navarra.es:

Diario de Navarra

http://moyenage.suite101.fr/article.cfm/des-cartulaires-medievaux-exposes-en-2010  (23/09/2010).
Nota de prensa. Gobierno de Navarra (15/09/2010); http://www.navarra.es/  Texto:
Archivo General de Navarra: http://www.cfnavarra.es/agn/  
Las imágenes referenciadas proceden de estas URL’s.

Fragmento del cartulario de Teobaldo I de Navarra


Testamento de Carlos II de Navarra


20 septiembre, 2010

LOS CLÉRIGOS, CULTURA ESCRITA Y PODER REAL EN LA CANCILLERÍA REAL CASTELLANA (Siglos XII-XIII)

Clercs, Alphabétisation et Pouvoir Royal dans la Chancellerie Castellaine (XII-XIIIéme siècles).
Clergymen, Literacy and Royal Power in the Castillian Chancellery (XII-XIIIth centuries).

Reciente edición digital del libro de Amaia ARIZALETA: Les Clercs au palais. Chancellerie et écriture du pouvoir royal (Castille, 1157-1230) = Los clérigos de palacio. Cancillería y cultura escrita del poder real (Castilla, 1157-1230). Editado en París (Francia) por SEMH-Sorbonne en 2010; consta de 368 p., y ha sido editado electrónicamente en la colección Études 1 en la Editorial digital Les Livres d'e-Spania.

Publicado con la colaboración de AILP (GDRE nº 671 del CNRS).
Créditos de la cubierta: París. Bibliothèque Sainte-Geneviève. Ms. 0341, fol. 157.

Sobre la obra

La autora ve en la escritura que practican los clérigos de la cancillería real castellana en los años finales del siglo XII y principios del XIII, el origen de las primeras muestras, en Castilla, de una literatura que se inclina hacia la ficción. Su estudio de la escritura de la cancillería es desde luego extraordinario: el nacimiento y desarrollo del fenómeno, y luego el retrato completo de una situación hasta ahora prácticamente desconocida de los grupos, los jefes, las escuelas, de las rivalidades existentes y de los grandes logros que alcanzaron quienes se movían y trabajaban en la cancillería. Salen definitivamente de la penumbra algunas personalidades sobresalientes: Juan de Osma, sobre el cual arrojó no poca luz un coloquio reciente del SIREM en la Sorbona, el enigmático Mica, que Amaia Arizaleta considera el primer tránsfugo, el que abre el camino que lleva desde el cartulario hasta el escrito literario. De esto se trata en este estudio, de semejante cuestión central y decisiva, y por lo tanto inquietante: el paso casi imperceptible del cartulario adornado a una escritura narrativa que entra en relación estrecha con la tradición de las ficciones ejemplares.

El objetivo de este trabajo se sitúa entonces en esa zona indeterminada entre cartulario y literatura. Pero lo que propone exactamente la autora, el producto de su análisis, constituye también un lugar indeterminado de la ciencia y de la literatura. Hay algo, en el fondo, muy literario, o novelesco, dentro de un acercamiento al pasado muy erudito y rigurosamente científico, y expuesto, a la vez de manera exquisita.

Sobre la autora

Amaia Arizaleta es Catedrática de la Universidad de Tolosa, responsable del equipo Lemso (Literatura medieval y del Siglo de Oro, CNRS-UMR 5136 Framespa) y del Máster de investigación Estudios románicos, es también miembro del comité de dirección de la Sociedad de Estudios Medievales y Renacentistas (SEMYR) así como de varios comités científicos de revistas y colecciones internacionales.

Autora de más de setenta estudios sobre la cultura clerical hispánica en los siglos XII y XIII, escribió La translation d’Alexandre y dirigió Poétique de la chronique así como el número 8 de la revista Troianalexandrina dedicado al Libro de Alexandre. La escritura de clerecía, la historia intelectual medieval hispánica y el paisaje discursivo de la Edad Media central en Castilla son sus principales temas de investigación.

El libro es descargable en formato "pdf" en: http://e-spanialivres.revues.org/154

Estructura de la obra

Introducción.
Cap. 1: "Es un texto, y sobre todo, pretexto".
Cap. 2: La cultura escrita en la Cancillería.
Cap. 3: Escribir la historia de los reyes.
Cap. 4: La bondad de la escritura.
Conclusiones.
Anexos.
Bibliografía.

Esta información ha sido extraída de http://e-spanialivres.revues.org/154

Recomendamos a nuestros lectores leer también la revista electrónica editada por los Hispanistas medievalilstas de la Universidad de la Sorbona (París, Francia) e-Spania. Revue interdisciplinaire d'études hispaniques médiévales: http://e-spania.revues.org/

Madrid, 20 Septiembre 2010.
Alfonso Sánchez Mairena. Editor http://cartulariosmedievales.blogspot.com/

16 septiembre, 2010

1ª JORNADAS DE INVESTIGADORES PREDOCTORALES EN CIENCIAS DE LA ANTIGÜEDAD Y DE LA EDAD MEDIA




Cuestiones metodológicas y estado de la investigación.

Fecha: 27 - 29 de octubre 2010
Organiza: Universidad Autónoma de Barcelona - UAB (Bellaterra, Barcelona)




Las Jornadas están organizadas por el Grupo de Investigadores en Formación del Departamento de Ciencias de la Antigüedad y de la Edad Media de la Universidad Autónoma de Barcelona, integrado por Ainoa Castro Correa y otros jóvenes investigadores de la cultura medieval.

Se ha publicado un documento (http://www.scribd.com/doc/35342032/Pre-Act-As) con las preactas propuestas, organizadas por ámbitos de investigación:
  • Historia Antigua
  • Filología Clasica
  • Arqueología Antigua
  • Arqueología Medieval - Historia Medieval.
  • Ciencias y Técnicas Historiográficas
Dentro de este último ámbito, destacan los trabajos de:
  • Ainoa CASTRO CORREA (Universidad Autónoma de Barcelona), sobre "La escritura visigótica en la diócesis lucense: problemas codicológicos y estado de la cuestión".
  • Lucía MEIJUEIRO BARROS (Universidad de Santiago de Compostela), sobre "Libros y bibliotecas en los monasterios gallegos (siglos XII-XIII)".
  • Olaya RODRÍGUEZ FUEYO (Universidad de Oviedo), sobre "El notariado en Oviedo en el siglo XIII: el ejemplo de Nicolao Iohannes".
  • Rubén MAGADÁN CORSÍO (Universiad de Oviedo), sobre "Las parroquias de Oviedo en los siglos XIII-XV".
  • Marcos FERNÁNDEZ FERREIRO (Universidad de Santiago de Compostela), sobre "Siervos y esclavos en el NO altomedieval: el vocabulario de la dependencia en los tumbos de Celanova, Samos, Sobrado y Tumbo A de la Catedral de Santiago".
  • Leticia AGÚNDEZ SAN MIGUEL (Universidad de Cantabria), sobre "Problemas metodológicos en el aprovechamiento del estudio de lso cartularios monásticos: el ejemplo del Becerro Gótico de Sahagún (1110)".
  • Amelia GARCÍA MEDINA (Universidad Complutense de Madrid), sobre "El scriptorium de la catedral de Sigüenza entre 1124 y 1221".
  • Ricardo PICHEL GOTÉRREZ (Instituto de la Lengua Gallega - Universidad de Santiago de Compostela), sobre "Contribución al estudio codicológico de manuscritos hispánicos trecentistas: el caso de la Historia Troiana (BMP, Ms. 558)".
  • Teresa Mª. CRIADO VEGA (Universidad de Córdoba), sobre "Tratados y recetarios técnicos en la España Medieval".
  • Mercedes LÓPEZ-MAYÁN (Universidad de Santiago de Compostela), sobre "Liturgia y manuscritos en la Castilla medieval: algunos problemas metodológicos en el estudio de los pontificales".
  • Luciano José VIANNA (Universidad Autónoma de Barcelona), sobre "Text i context: els códexs del Libre dels Fets" = "Texto y contexto: los códices del Libro de los Hechos".
  • Araceli COLL i SANABRA (Universidad Autónoma de Barcelona), sobre "Qüestions relatives al tractament de la informació sobre Alguaire y el seu monestir santjoanista" = "Cuestiones relativas al tratamiento de la información sobre Alguaire y su monasterio sanjuanista".
  • Ángela M.ª RODRÍGUEZ LÓPEZ (Universidad de Santiago de Compostela), sobre "La biblioteca de los condes de Benavente en el siglo XV".
  • David ANDRÉS FERNÁNDEZ (Universidad de Zaragoza), sobre "Ciencias y Técnicas Historiográficas aplicadas a la música medieval".
Felicitamos a los organizadores y a los participantes por su interés y esfuerzo en el fomento de estos temas; especialmente a Ainoa Castro por su energía vital y que pronto pueda leer su tesis sobre la documentación medieval en escritura visigótica producida en el medievo lucense.
Estas jornadas tienen el gran interés de divulgar las investigaciones que se están llevando a cabo en estos momentos en España sobre diferentes temas de la cultura medieval. Destaca entre las propuestas el interés por la lectura de los Cartularios medievales hispánicos, así como la presencia de estudios sobre Scriptoria, escribas, notarios y sobre librerías medievales.

Alfonso Sánchez Mairena (Editor de http://cartulariosmedievales.blogspot.com/; 15/09/2010)